El monitoreo de pH esofágico de 24 horas con impedanciometría es una prueba especializada utilizada en pacientes con reflujo gastroesofágico severo o que no responden adecuadamente a las terapias convencionales. Este examen permite medir de manera continua el grado de acidez y/o alcalinidad dentro del esófago a lo largo de un período de 24 horas, proporcionando información detallada sobre la naturaleza y características del reflujo.
Procedimiento y Tecnología
Durante el monitoreo de pH esofágico de 24 horas, se colocan pequeños sensores en el esófago del paciente a través de una sonda delgada y flexible. Estos sensores están diseñados para registrar los niveles de pH en diferentes puntos del esófago a intervalos regulares durante todo el período de la prueba. La impedanciometría, parte integral de este procedimiento, complementa la medición del pH al caracterizar la altura, tipo, duración, posición y asociación de los síntomas con los eventos de reflujo.
Indicaciones y Utilidad Clínica
Esta prueba es especialmente útil en pacientes con síntomas de reflujo gastroesofágico que no se resuelven con tratamiento convencional, ayudando a determinar la gravedad del reflujo y si los síntomas están asociados con eventos ácidos o no ácidos. Además, proporciona información valiosa sobre la efectividad de la terapia anti-reflujo y puede guiar ajustes en el manejo clínico del paciente.
Preparación y Consideraciones
Para asegurar la precisión de los resultados, es crucial que el paciente siga cuidadosamente las instrucciones de preparación. Esto incluye suspender el uso de antiácidos, procinéticos y inhibidores de la bomba de protones al menos 7 días antes del procedimiento, ya que estos medicamentos pueden alterar los niveles de pH y afectar los resultados del monitoreo.
Interpretación y Seguimiento
Una vez completada la prueba, los datos recopilados se analizan cuidadosamente para evaluar la frecuencia, la duración y la asociación de los episodios de reflujo con los síntomas del paciente. Estos hallazgos ayudan al médico a formular un plan de tratamiento más preciso y personalizado, dirigido a controlar los síntomas y prevenir complicaciones a largo plazo asociadas con el reflujo gastroesofágico crónico.






